El mercado eléctrico español se encuentra en plena transformación, entre otras cosas con la implementación del mercado cuartohorario (QH). Este cambio estructural, exigido por la regulación europea (Reglamento UE 2017/2195, Electricity Balancing Guideline), marca un antes y un después en la operativa del sistema eléctrico y en las estrategias de todos los agentes del mercado: desde comercializadoras hasta generadores, pasando por consumidores electrointensivos, agregadores y operadores del sistema.
Este artículo analiza las implicaciones técnicas y operativas del nuevo marco, los ajustes realizados en los mercados diario, intradiario y de balance, y las oportunidades (y retos) que surgen para cada tipo de participante.
¿En qué consiste el nuevo modelo cuartohorario?
A partir de octubre de 2025, el mercado diario eléctrico español transicionará de una resolución horaria (con 24 periodos de casación) a una cuartohoraria (con 96 tramos diarios de quinceminutales). Actualmente ya se cuenta con algunos conceptos que se liquidan de manera cuartohoraria como los desvíos.
Este cambio no es exclusivo de España: países como Alemania, Francia o Países Bajos ya operaban bajo un esquema cuartohorario. La transición española, inicialmente prevista para 2021, se ha retrasado hasta contar con las adaptaciones técnicas necesarias por parte de OMIE, REE y el conjunto de agentes del sistema.
Objetivos y justificación de la reforma
La adopción del mercado cuartohorario responde a varias palancas regulatorias y técnicas:
Integración eficiente de energías renovables variables (VREs)
La generación fotovoltaica y eólica presenta fuertes variaciones intra-horarias que no podían ser adecuadamente gestionadas con precios horarios. Con tramos de 15 minutos, la señal de precio refleja mejor estas oscilaciones, facilitando una programación más precisa y penalizaciones de desvíos más ajustadas.
Armonización con el mercado interior europeo de electricidad
La legislación comunitaria promueve un modelo de mercado único en el que los horizontes temporales de casación y balance estén alineados entre países. La resolución cuartohoraria es ya el estándar en la mayoría de hubs eléctricos europeos.
Impulso a la flexibilidad del sistema
La nueva estructura abre la puerta a una mayor participación de la respuesta activa de la demanda, agregadores independientes, almacenamiento, y recursos distribuidos. La granularidad temporal es clave para monetizar su capacidad de adaptación a precios en tiempo casi real.
Mayor eficiencia económica y operativa
La penalización más precisa de desvíos genera incentivos más potentes para la mejora de las previsiones de generación y consumo. Además, permite asignar de forma más equitativa los costes reales del desbalance del sistema.
Implicaciones técnicas en la operación del mercado
Casación del mercado diario e intradiario
OMIE actualizará su sistema de casación para calcular 96 precios marginales diarios. La participación de los agentes se realiza con ofertas desagregadas por cuartos de hora, lo que requiere ajustes en los sistemas de gestión comercial (PPA, cobertura de riesgos, previsión, etc.).
El mercado intradiario continuo también opera ya bajo resolución cuartohoraria, facilitando una reacción más rápida ante errores de previsión o eventos meteorológicos imprevistos.
Servicios de balance y control de desvíos
REE ha adaptado la plataforma e-Sios y sus modelos de cálculo para gestionar desvíos cuartohorarios, lo que mejora:
El reflejo económico del desbalance: los desvíos ahora se miden y liquidan cada 15 minutos, y no sobre la base horaria anterior, aumentando la señal de coste real para los responsables de balance.
La activación de reservas de regulación secundaria y terciaria, que ahora pueden alinearse mejor con la realidad del sistema.
Liquidaciones y facturación
Este cambio afecta a todas las liquidaciones: OMIE (mercado diario e intradiario), REE (desvíos y servicios de ajuste) y comercializadoras (relación con clientes). Los sistemas deben ahora manejar y almacenar 4 veces más datos por día, y adaptar las estructuras contractuales (tarifas, PPA, curvas de carga, etc.) a esta resolución.
Impacto por tipo de agente
Generadores renovables
- Mayor presión para mejorar modelos de predicción de corto plazo (ahora intra-horarios).
- Penalizaciones más precisas por desvíos, lo que exige una gestión activa y continua de la programación.
- Nuevas oportunidades para el almacenamiento (baterías, hidráulica) como herramientas de ajuste rápido.
Comercializadoras y representantes de mercado
- Necesidad de integrar modelos de previsión de consumo y precios con granularidad cuartohoraria.
- Mayor exposición a la volatilidad intradiaria, especialmente para portfolios sin cobertura adecuada.
- Requiere automatización de procesos de compra-venta, gestión de desvíos y reporting operativo.
Consumidores electrointensivos y agregadores
- Pueden optimizar su consumo en ventanas de 15 minutos, capturando precios más bajos y evitando tramos caros.
- Se facilita la participación directa en mercados de balance para aquellos con flexibilidad operativa.
- Oportunidad de monetizar su capacidad de ajuste a través de servicios de flexibilidad.
Usuarios domésticos
- A corto plazo, el impacto es limitado, ya que la mayoría están bajo tarifas planas o indexadas horarias.
- A medio plazo, surgirán tarifas dinámicas y productos personalizados basados en precios cuartohorarios, especialmente para hogares con autoconsumo o almacenamiento.
Riesgos y retos de implementación
- Complejidad tecnológica: adaptación de SCADAs, ERPs, BMS, plataformas de mercado y contadores inteligentes.
- Incremento de datos: multiplicación por 4 del volumen de información a procesar, transmitir y almacenar.
- Coste de integración: especialmente relevante para agentes pequeños sin capacidades de TI desarrolladas.
- Volatilidad de precios: los picos de precio se concentran en tramos muy cortos, dificultando cobertura y estrategia.
Conclusiones
La transición al mercado cuartohorario en España supone un avance hacia un sistema eléctrico más digitalizado, flexible y resiliente. Si bien plantea retos técnicos y operativos importantes, también habilita nuevas oportunidades para agentes que sepan adaptarse y optimizar sus decisiones en tiempo real.
Este nuevo marco será clave para absorber con éxito el crecimiento renovable previsto en la planificación energética nacional, y para posicionar a España como hub eléctrico competitivo y alineado con la estrategia de descarbonización europea.